como un grano de mostaza, podríais decir a este sicómoro: Desarráigate, y plántate en el mar; y os obedecería.
diciendo: ¿Qué quieres que te haga? Y él dijo: Señor, que reciba la vista.
Jesús le dijo: Recíbela, tu fe te ha salvado.
Efesios
2:8
Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios
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La Palabra de Dios nos menciona en muchas ocasiones la Palabra Fé. Pero, ¿qué es la Fé?
Es la certeza de algo que se espera y la convicción de lo que no se ve (Hebreos 11:1), todos los seres humanos nacemos con Fé, unos tienen más, otros menos, pero todos venimos con ella "de fábrica". Del
mismo modo que cuando somos recién nacidos sabemos buscar el pecho de nuestra Mamá, así mismo el ser humano todo lo que hace a lo largo de su vida: planes, proyectos, creencias, estudios....
todo lo hace por fé, pone fé en aquello que considera que va a poder realizar.
Es muy importante que esa Fé que Dios nos ha dado a cada uno, la pongamos en aquello para lo cual va a dar fruto y va a ser aumentada. Para ello es primordial que tomemos como referencia en todo
momento la Palabra de Dios para saber sobre qué o mejor dicho, sobre Quién debemos depositar nuestra Fé.
Romanos 5:1-2
Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo;
por quien también tenemos entrada por la fe a esta gracia en la cual estamos firmes, y nos gloriamos en la esperanza de la gloria
de Dios.
Analizando bien, la Fé proviene del ámbito espiritual. La Palabra dice que
nadie ha visto jamás a Dios (1 Juan
4:12), ...Bienaventurados los que no vieron, y creyeron. (
Juan 20:29), Dios nos dice a través de su
Palabra que nadie le ha visto y que aquellos que creen en Él sin verle son bienaventurados.
Marcos 11:22 Respondiendo Jesús, les dijo: Tened
fe en Dios... Dios nos dice que
debemos creer
en Él sin verle.
Pero, ¿Cómo puedes tener más Fé? Muy buena pregunta, veamos que nos dice Dios:
Romanos 10:17 Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios.
Lucas 17:5 Dijeron los
apóstoles al Señor: Auméntanos la fe.
Entonces, tengamos libertad y confianza en pedirle al Señor que aumente nuestra fé, sabiendo también que,
a través de la lectura diaria de la Santa Biblia, iremos adquiriendo más fé
y así iremos creciendo espiritualmente.
El Pueblo de Israel era alimentado a diario con el Maná (leer Éxodo 16:15), Dios alimentaba directamente a su pueblo con comida que Él les enviaba fresca cada día y así, no sólo se mantenían con vida
sino que se mantenían en salud durante 40 años... de la misma manera Dios nos da su Palabra para que nos alimentemos y nutramos nuestras almas leyéndola cada día,
mientras nuestra Fé va
aumentando.
Con la lectura de la Palabra de Dios, la oración y relación diaria con nuestro Señor Jesucristo, no sólo tendremos una buena salud espiritual, sino que iremos creciendo y
fortaleciéndo nuestra Fé, pudiendo compartir con otras personas acerca de ella y estaremos preparándonos para ayudar a otros a que
enfoquen bien su Fé, y la
depositen en nuestro Señor Jesucristo.
¡ Dios te bendiga y te dé cada día más Fé en el nombre de nuestro Señor Jesucristo!